1.Refuerza tendones y ligamentos:El entrenamiento con cargas aumenta la estabilidad de las articulaciones al incrementarse la resistencia estructural de la masa muscular, tejido conectivo, tendones y ligamentos, produciéndose mas proteínas de colágeno en cada una de ellas.
2.Evita la pérdida muscular a consecuencia de la edad:
Tanto la masa muscular como la fuerza tienden a disminuir con los años, la atrofia muscular (pérdida de tejido muscular) ocurre, en primer lugar sobre las fibras musculares de contracción rápida que son las involucradas en actividades explosivas y de fuerza. El entrenamiento de fuerza puede ayudar a prevenir este proceso involutivo.
3.Incrementa la densidad ósea :
Las mujeres mayores de 35 años pierden anualmente alrededor de un 1% de su masa ósea; proceso que se acelera con el inicio de la menopausia. Diversos estudios demuestran que los huesos, cuando están sometidos al estrés que se genera en el entrenamiento con peso, tienen un índice elevado de contenido mineral.
4.Incrementa el metabolismo basal :
Con la edad disminuye el metabolismo basal ( un 2 a 5 % por cada decada) y ocurre por la reducción del tejido muscular, lo que se traduce por un aumento de tejido graso. El entrenamiento de fuerza puede incrementar el metabolismo en estado de reposo, porque aumenta el tejido muscular, que es metabolicamente más activo que el tejido graso.
5.Mejora el metabolismo de la glucosa :
Hay un incremento de la sensibilidad celular a la insulina y una mejora de la tolerancia a la glucosa con el trabajo de fuerza. Esto se debe a los cambios producidos en la composición corporal y a los incrementos de la capacidad aeróbica máxima.
6.Reduce las lesiones :
Una musculatura fuerte está más capacitada para resistir las tensiones derivadas de las actividades físicas. La mayoría de las lesiones se producen por un desequilibrio muscular.
